RESEÑA Y OPINIÓN | COCO
El día de
Muertos es una festividad muy particular en nuestro país (México), en esta
fiesta honramos la memoria de los que se fueron pero que siguen en nuestro
corazón, con comida, bebida y cosas que en vida nuestros antepasados disfrutaban,
estas se colocan en un altar y esperamos su regreso al mundo de los vivos,
ellos disfrutan de todo aquello que se les pone y finalmente regresan al mundo
de los muertos.
La historia que
nos presenta Disney Pixar narra la vida de la familia Rivera, la cual
debido al pasado de la misma no quiere saber nada acerca de la música y
prefiere centrarse en el oficio que fue heredado de generación tras generación
por “Mamá Imelda”, Miguel, nuestro protagonista decide romper este molde y
busca una oportunidad para demostrar de que está hecho. Al enterarse de que el
mayor icono de la música “Ernesto de la Cruz” es su tatarabuelo este decide
seguir sus pasos, cosa que a su familia no le agrada, la familia de este decide
acabar con ese sueño rompiendo la guitarra que llevaba Miguel tiempo atrás,
Miguel roba la guitarra que es de su antepasado y accidentalmente entra al
mundo de los muertos, pero no de forma radical como se supone, sino que se
encuentra atrapado entre ambos mundos.
Debido a este incidente nuestro
protagonista debe de ir directamente al mundo de los muertos para que lo
traigan a la tierra a la que él realmente pertenece. Al entrar a la tierra de
los muertos Miguel encuentra a Mamá Imelda la cual no pudo cruzar debido a que
él quitó la foto de ella del altar de muertos y sin eso no era posible cruzar,
al enterarse de esto ella debe bendecir una flor de cempoalxóchitl para que
Miguel logre regresar a donde pertenece, ella bendice la flor con la condición
que Miguel nunca vuelva a mencionar la música, a lo que él no accede y decide
buscar a su tatarabuelo para que le dé la bendición sin la condición antes
impuesta.
En su aventura
para encontrar a “de la Cruz” se encuentra con un viejo conocido del mismo,
Héctor, él hace un trato con Miguel que debe de ayudar a cruzarlo del lado de
los vivos si lo lleva con Ernesto. Pero para llegar a él es necesario enfrentar
diversos obstáculos no sólo con su familia sino en la tierra mima. Finalmente
logra encontrar a su tatarabuelo y decide mostrarle el talento que le heredó,
pero todo cambia cuando ve como es realmente él y lo que hizo con el que se
suponía era su mejor amigo (Héctor).
La familia
Rivera va en rescate de Miguel, y este al enterarse de la verdad acerca de la
familia cambia su forma de ver la esencia de esta.
COCO sin duda
mueve sentimientos en las personas que vemos esta festividad como el esperado
reencuentro con aquellos que ya nos dejaron, sean abuelos, padres o cualquier
otra persona que nos dejó y que por una noche vuelven para estar con nosotros.
Lee Unkrich
hace un buen trabajo retratando el encanto de estas fechas, se generan risas y
llanto durante la historia, cierto es que no faltan los clichés como la familia
numerosa o los contrastes sociales, si dejamos eso de lado salimos del cine con
una sonrisa en la cara, amando un poco más nuestra tierra y lo que somos. Otro
aspecto en lo que resalta la película fue la música, cantantes como Carlos
Rivera o Marco Antonio Solís hacen que sea maravillosa, ya que con sus voces
generan sensaciones inexplicables y que si tomamos como ejemplo otra película
enfocada en esta festividad como es el caso de “El Libro de la Vida” (2014),
esta última no genera la conexión necesaria con la audiencia debido en parte a
la música que nos presenta, una música sin identidad nacional, una música más
comercial.
Es importante
que al ir al cine a verla estés consciente de que habrá familias con niños
pequeños que probablemente griten y estén inquietos porque ya se aburrieron, si
esto pasa, sólo respira y disfruta de la película, valdrá la pena. “COCO” es
una buena película para pasar el tiempo con la familia o con cualquier persona
querida, te muestra la importancia que nosotros como mexicanos le damos a la
familia, a la muerte y al amor. No puedo decir que es perfecta porque tiene ciertas
cuestiones que te ponen en un limbo nacionalista entre lo que somos realmente y
el cómo nos hacen ver allá afuera.
Calificación: 9/10
Por: Angélica Lestrange